Las quejas vecinales y las presiones de la oposición hacen cambiar la tramitación de la inclusión en el nuevo catálogo municipal de patrimonio cultural de las casas de Olabarrieta
El Ayuntamiento amplía el plazo para alegaciones y ofrecerá más información a vecinos y vecinas
El nuevo catálogo municipal de patrimonio cultural de Galdakao a proteger aprobado, con carácter inicial, en el pleno del 22 de diciembre, ha puesto en pie de guerra a los vecinos y vecinas de las casas del conocido como Poblado Firestone en Olabarrieta.
Tras formar una plataforma y entregar en el Ayuntamiento más de 600 firmas mostrando su disconformidad con esta medida y quejándose de la falta de información sobre las consecuencia que derivan de ella, como los derechos y obligaciones que conlleva, el Consistorio galdakoztarra ha decidido “ralentizar la la tramitación de la aprobación del catálogo con la intención de dar aun más tiempo para recabar todas las dudas que puedan tener los y las propietarias». Por tanto, queda paralizado también el inicio del plazo de 30 días para la presentación de alegaciones.
En cuanto a la queja de falta de información, el Ayuntamiento pondrá en marcha varios canales de información, como habilitar un espacio en la plataforma de participación erabaki.galdakao.eus a modo de foro de consulta de dudas o podrán, también, realizar sus preguntas de manera presencial el Centro de personas mayores de Olabarrieta (del 7 al 14 de febrero de 18:00 a 20:00) o en el Ayuntamiento de Galdakao (del 8 al 15 de febrero de 18:00 a 20:00).
Partidos de la oposición
Todos los grupos políticos de la oposición (EAJ-PNV, PSE-EE y concejal no adscrito) han mostrado su malestar por la forma de gestionar este asunto y la falta de transparencia en el proceso.
EAJ-PNV ha solicitado que “Eh Bildu facilite y sufrague como en otras ocasiones la consulta que pide la plataforma de vecinas y vecinos de Olabarrieta” y se pregunta si fueron informados e informadas antes de llevar a cabo esta medida.
Por su parte, los socialistas de Galdakao han ahondado en esta postura, solicitando una consulta para respetar los deseos de los vecinos y vecinas de Olabarrieta de que se excluyan sus viviendas del nuevo Catálogo de Patrimonio Cultural. Las fuentes socialistas también apuntan que “hay otras formas de proteger este tipo de conjuntos, sin necesidad de asumir los perjuicios que implica su incorporación al catálogo como, por ejemplo, a través del Plan General de Ordenación Urbana, de cuya renovación y modificación apenas sabemos nada aún”.
Por último, afirman que «todos los partidos dimos el visto bueno al inicio de esta tramitación, pero desconocíamos que la parte afectada no había sido informada sobre los que suponía entrar en este catálogo y que ni tan siquiera pudieron presentar alegaciones porque no conocían el proceso de manera previa, así que una vez conocidos estos hechos y escuchadas atentamente sus preocupaciones y motivaciones, consideramos que ahora podemos modificar algo que no está bien realizado desde su inicio”.
